14/09:octava audiencia:¡habrá que esperar un poco más!

Hoy, Viernes 14 de Septiembre, tuvo lugar la octava audiencia del juicio.

En esta ocasión, declaró un perito del Cuerpo Médico Forense, quien nos realizó un extenso y exhaustivo peritaje a las víctimas y querellantes de esta causa, antes del inicio del debate, por decisión del Tribunal Oral.

 En la audiencia, el perito explicó su categórico informe sobre la "sólida credibilidad" de nuestros dichos, y también se explayó acerca de sus contundentes conclusiones sobre los "daños ocasionados" en quienes somos las víctimas de esta causa, por los abusos perpretados por el entonces hermano marianista Fernando Picciochi.

Cabe señalar que nuestro abusador se negó a ser peritado por el Cuerpo Médico Forense.

 Pd1:Por unos planteos menores de la defensa, y por cuestiones de agenda del Tribunal, todavía no podemos saber la fecha de los alegatos y del veredicto.

 Pd2:en esta audiencia, volvió a declarar el imputado Picciochi.

     Como en sus anteriores intervenciones, nuestro agresor se dedicó a intentar descalificar (¡sin ningún éxito!) a quienes fuimos sus víctimas, a sus propios testigos en este juicio (¡que en ningún caso declararon como él lo esperaba!), a su anterior abogado particular, al Juzgado que desarrolló la instrucción de la causa, y al Tribunal que lleva adelante este debate oral.

 pd3: Como un detalle de la declaración de Picciochi, quisiera señalar que el ex hermano marianista señaló que "en el año 2000, el padre Luis Casalá -superior de la congregación- me ofreció volver a dar clases en el colegio, ya que hasta ese momento (¡justo cuando sus víctimas presentamos esta denuncia penal!) seguía relacionándome fluidamente con los religiosos y el Colegio Marianista".

     Quisiera volver a resaltar que en 1991, el Instituto Cultural Marianista, a través del jerarca religioso Luis Casalá, tomó conocimiento institucional de la agresión sexual de Fernando Picciochi a un alumno, sin tomar ninguna medida sancionatoria con respecto al entonces docente y religioso (hecho abordado con amplitud en este juicio, en la declaración de Casalá del 23 de Agosto, quien confirmó la ocurrencia de aquel episodio).

    A su vez, en este juicio, tanto el padre Casalá como nuestro abusador Picciochi (ante el estupor generalizado de quienes nos encontrábamos en la sala), definieron a la agresión sexual de 1991 , por parte del entonces religioso y docente hacia un alumno, como un supuesto "juego" (¡!).

 Pd4:la próxima audiencia tendrá lugar el Miércoles que viene, a las 11hs.